Asón Agüera Mollinedo Circular monte Tejea Burgüeño 5/9/2018
Mapa de la ruta
Detalle de la ruta
La ruta en Google Earth
Perfil de la ruta
El río Agüera se encuentra en el límite oriental de Cantabria lindante con el País Vasco. Enclavado en el Valle de Villaverde (anteriormente Villaverde de Trucios), coge sus aguas de las correntías que se agrupan en las fuentes del Agüera provenientes de las lluvias que escurren del monte Burgüeño enclavado en el macizo vizcaíno de Ordunte.
Monte Tejea
El curso del río Agüera es corto, nace en el monte Tejea, al sur de Villaverde, parte conocida como Sierra Escrita, precede a los montes de Ordunte, franja septentrional del valle del Mena. El Agüera continúa al norte por Trucíos, entra en Cantabria por el valle de Guriezo y desemboca junto a Oriñón, perteneciente al término de Castro Urdiales, entre los peñones de Candina y Cerredo.
Libélula atrapada
Geográficamente, el valle está rodeado de los municipios vizcaínos de Carranza, Arcentales y Trucíos, pertenecientes todos a la Comarca de las Encartaciones (comarca del País Vasco).
Su cumbre más elevada es el Pico Burgueño dentro de Vizcaya haciendo divisoria de aguas con Castilla y León.
Arcada en la ermita
El valle fue devastado durante la Tercera Guerra
Carlista. En agosto de 1875, Villaverde fue el escenario de una batalla entre
el ejército alfonsino y los carlistas. A pesar de encontrarse en inferioridad
numérica, la victoria fue para el bando carlista. Con casi 300 muertos entre
ambos bandos, de aquí deriva el nombre de su capital La Matanza.
El pretendiente al trono Carlos VII concedió a Fulgencio de Carasa el título de "Conde de Villaverde de Trucíos" como recompensa por la victoria.
Grafía sobre piedra en la ermita
El valle fue adquirido a mediados del siglo XV por Pedro Fernández de Velasco, segundo conde de Haro, dejando de pertenecer al señorío de los Ayala y Salcedo, a los que habían estado vinculadas Las Encartaciones durante la Edad Media, lo cual fue el antecedente de su actual situación como enclave cántabro en Vizcaya.
Por el Monte Tejea
Pongámonos a la tarea y, vayamos con el relato.